La explosión de las motos personalizadas llevó a un director de cine meterse de lleno en esta subcultura y realizar un documental, que se estrenará antes de fin de año.
Hace nada te hablamos de una Ducati MH900e, que un cineasta hizo fabricar especialmente para él. Muy bien, Gareth Roberts decidió, además de hacerse el mimo de una custom propia, contar en un filme todos los secretos del mundo de las dos ruedas. Así juntó entrevistas, eventos y más, en el documental Oil in the Blood.
Roberts no solamente es amantes de las motos, también es cofundador de la casa The Bike Shed Motorcycle Club. Vendría a ser un lugar donde se juntan motoqueros de toda clase (desde simples usuarios de motos a preparadores). Por pertenecer a la subcultura motor, este director de cine británico, se dio cuenta que la cantidad de gente iba en aumento.
Después de caer en la cuenta de que había cada vez más fanáticos de las motocicletas, Gareth, tuvo la idea de realizar esta película. Llegando a la conclusión de que personalizar motos, mostrarlas, o pilotarlas, es mucho más que un pasatiempo. Las motos se convirtieron en una forma de vivir para las personas que rodean la movida custom (sobre todo la británica).
Como rezan en la página de la productora, Moli Films, en la historia que se cuenta “se ve el romance del motociclismo como una búsqueda visceral y táctil, donde los motociclistas se ensucian las manos, mantienen y ajustan sus propias motos, y necesitan tener habilidades para manejarlas.” Además, se intenta explicar este boom desde la perspectiva humana, porque “ha crecido como un movimiento popular impulsado por personas en lugar de corporaciones.”
En el tráiler, que podés ver acá abajo, se adelanta que el director se metió de lleno adentro del mundo de las personalizaciones. Así quien vea la película se encontrará con los protagonistas y sus declaraciones en primera mano.
Oil In The Blood Promo. from MoliFilms on Vimeo.
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