La carrera de MotoGP terminó con un triunfo de Marc Márquez, y con la vuelta al podio de Valentino Rossi, que finalizó segundo. Como es costumbre, el público argentino estalló por la actuación del italiano, que es el piloto con más fanáticos en nuestro país.
En la vuelta de honor, en medio de los festejos, VR quiso celebrar de manera especial con quienes estaban en su grada. En el momento en que Il Dottore se acercó a la tribuna, un comisario del circuito de Termas fue corriendo a sacarse fotos. Allí fue cuando ocurrió el momento más inesperado del gran premio, Rossi le pidió al asistente que sostenga su moto, y este se subió a ella con total naturalidad.
Ese afortunado personaje se llama Franco Neirot, tiene 33 años, vive en Campo Contreras Viejo, un barrio de la ciudad. El hombre trabaja conduciendo una ambulancia para el hospital Cepsi Eva Perón, y en sus ratos libres es músico en un grupo de cumbia.
Después de haberse subido a la moto de VR46, Franco se convirtió en el comisario más famoso, porque las fotos y vídeos se viralizaron en las redes sociales. En las tantas grabaciones se ve como Valentino le toca el hombro a Franco, para decirle que le sostenga la Yamaha, y luego se sorprende por ver como se monta en la máquina, así que vuelve a hablarle. Según contó a los medios locales, el cruce entre él y Rossi fue muy breve: “Lo poco que entendí que me dijo fue ‘tené la moto’; y cuando vio que subí me dijo ‘¡no te vayas!’”.
Para cualquier fan del italiano lo que le sucedió a Franco es un sueño cumplido, este santiagueño lo vivió como algo único y muy especial. Con mucha alegría comentó que este momento inolvidable en su vida “será una gran historia para los chicos”.