Según informan los medios italianos, el Tribunal de Varese ha declarado la ejecución completa del concurso de acreedores de MV Agusta, cerrando así un ciclo que comenzó en 2016. Además de terminar de pagar su deuda, la marca ha dado por terminado el procedimiento de quiebra en donde estaba inmerso.
Después de siete años, la fábrica de Varese puede decir que está libre de deudas, todo gracias a lo ocurrido hace cuatro años atrás. Es decir, cuando la familia Sardarov se hizo cargo de la empresa, enfrentó la reestructuración y comenzó a invertir para sacar adelante la marca. Desde que ingresaron han inyectado más de 180 millones de euros, además de firmar grandes acuerdos comerciales, como el último con Pierer Mobility Group (KTM).
“Desde mi llegada a MV Agusta, salir del acuerdo con los acreedores ha sido uno de los principales objetivos que la dirección de la empresa se había fijado; ha logrado recuperar clientes, proveedores, y ha podido relanzar la marca”, declaró Timur Sardarov, CEO de MV Agusta Motor SpA.
“A pesar de los efectos negativos derivados de la pandemia del Covid-19, el aumento de los precios de las materias primas y el estallido de la guerra en Ucrania, el compromiso, la constancia y la profesionalidad de la dirección de MV Agusta prevalecieron y permitieron alcanzar este importante resultado. Ahora debemos mirar al futuro con renovada confianza, reconfortados por el éxito que están cosechando nuestros nuevos modelos”, continuó el empresario.
Sardarov finalizó: “La nueva asociación con KTM AG ya está impulsando nuestro negocio en todos los frentes, desde la producción de motocicletas nuevas, la expansión de nuestra red de distribuidores hasta la prestación de un servicio de clase mundial a todos nuestros apasionados clientes. Después de años oscuros, finalmente hemos creado las condiciones para permitir que MV Agusta escriba un nuevo capítulo en la historia del motociclismo”.
