Equipamiento

Nuevo proyecto de Honda: un casco con reconocimiento facial

La marca nipona presentó una serie de patentes en Estados Unidos como parte de un proyecto para crear su propio casco inteligente. Evitaría robos, y también haría de su uso una verdadera obligación.

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Los motociclistas se dividen entre los que usan casco, y los que no. Pero esto podría cambiar si se adopta la tecnología que pretende implementar Honda en su equipamiento inteligente. Principalmente porque el casco sería indispensable para que la moto encienda, y lo haría solamente si reconoce la cara de su propietario. Lo que también serviría como una medida de seguridad contra los delincuentes.

De ciencia ficción

Es cierto que suena salido de una película de ciencia ficción, pero si tenemos motos voladoras ¿por qué no un casco con reconocimiento facial? Podría hacerse realidad en algunos años, ya que la casa nipona está trabajando en ello, con patentes que detallan minuciosamente las características de la pieza y su tecnología.

Según la explicación brindada por Honda, en conjunto con los bocetos presentados, este casco evitaría el uso de las llaves. Con esto se solucionan dos problemas, uno es el robo de llaves, y otro (que nos pasa a todos) es la pérdida de las mismas. Claramente el casco es más difícil de olvidar o perder; mientras que si lo robasen no podrían utilizarlo, por su tecnología de reconocimiento.

El proceso de la marca japonesa contempla el sistema de reconocimiento facial del casco, pero solamente en conjunto con un nuevo scooter eléctrico. El rodado no sería el mismo que Honda presentó en el Tokio Show de 2017, es decir el PCX, si no otro con diferentes características, pero que seguramente tendrá similitudes.

Tal como aseguró la fábrica, tanto el modelo de dos ruedas como el casco se venderían en conjunto. Mientras que el casco podrá comprarse solo, si es que el vehículo tiene más de un conductor, ya que el equipamiento solo puede reconocer a un usuario.

Mediante una cámara escáner en el casco, se reconocería el rostro del portador. Luego de ello se desbloquearía el scooter para poder encenderlo, impidiendo que se ponga en marcha si no es el propietario de la moto quien se coloca el casco. Se convertiría así en un dispositivo contra robo, así como solucionaría otro problema, que muchos motociclistas no usan el casco.

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