La marca de los diapasones actualizó la XSR900 y la convirtió completamente. Ahora causa sensación como una bella café racer, que mezcla diseño inspirado en los 80´s y tecnología de última generación.
La casa de Iwata sorprendió con la actualización de la Yamaha XSR900, un modelo que se presentó en 2016 y que ahora cambió totalmente su fisonomía. La metamorfósis de la deportiva retro la dejó como una café racer, con marcados aires neo retro. Pero también quedó dotada de un paquete electrónico renovado y completo, así como amplias mejoras en su comportamiento.
La nueva inspiración
Sin dudas, el cambio a nivel diseño de la máquina es lo primero que resalta. Si bien el modelo anterior ya se mostraba como una motocicleta neo retro, esta edición tiene un corte completamente distinto, siendo una café racer con una nueva ergonomía. Varios aspectos han cambiado en su exterior, el escape, el tanque de combustible, el asiento, los retrovisores.
Lo cierto es que su diseño se inspira en las motocicletas de competición de Yamaha de la década del 80, y viene en dos versiones. La Legend Blue específicamente basa su estética en la montura del Team Gauloises Yamaha OW81 de Christian Sarron. También estará disponible como Midnight Black, que viste de color negro con detalles en rojo. Ambas llevan luces de LED y nueva pantalla TFT a color de 3,5 pulgadas.
Pero no solamente ha recibido cambios estéticos; su chasis es un Deltabox evolucionado, muy parecido a los usados en los 80’s. Este cuadro de aluminio mejora la maniobrabilidad, sobre todo los pasos por curvas, y hace más ligero el conjunto, lo que logra una moto más ágil. Por dentro guarda el motor tricilíndrico CP3 de 889 cc, que puede generar una potencia de 119 CV a 10.000 rpm y un torque máximo de 93 Nm a solo 7.000 rpm, 1.500 vueltas por debajo de la edición anterior, además de que tiene 4 caballos más de potencia.
Se equipa con frenos de primer nivel marca Brembo, destacando una bomba de frenos en el eje delantero. Las suspensiones son también premium, ambas firmadas por KYB. En las llantas tiene la exclusiva tecnología Spinforging, que reduce el peso en 700 gramos en las dos ruedas. Su tanque de combustible tiene una capacidad de 15 litros e incluye nuevas tomas de admisión de aire adelante, para mejorar la eficiencia del motor.
Su paquete electrónico comienza por la Unidad de Medición Inercial de seis ejes, con dos sensores de velocidad y aceleración en tres ejes. Esta IMU es un 50% más chica y un 40% más ligera que la utilizada por la R1. Transmite los datos hacia la ECU para lograr el funcionamiento eficaz de los tres sistemas de asistencia: el sistema de control de tracción (TCS) sensible a la inclinación, el sistema de control de deslizamiento (SCS) y el sistema de control de elevación de la rueda delantera (LIF).
Además, la XSR900 cuenta con cuatro modos de conducción o D-Mode, uno más que la edición anterior. El primer nivel entrega la máxima potencia, y los tres restantes van decreciendo para obtener una respuesta más suave de la máquina. Incorpora también el QSS o sistema de cambio rápido, que permite lograr una óptima aceleración a toda velocidad, y realizar cambios descendentes sin embrague para mejorar la estabilidad y la entrada en las curvas.
Por el momento la Yamaha XSR900 2022 está confirmada solamente para el mercado europeo, sin descartar una posible llegada a Estados Unidos. Todavía no se ha informado nada sobre su lanzamiento en Latinoamérica o Argentina (acá se comercializa su versión anterior).
Ficha técnica
Motor: Tricilíndrico, 4T, de 889 cc, con refrigeración líquida por agua
Diámetro x carrera: 78,0×62,1 mm
Potencia: 119 CV a 10.000 rpm
Par motor: 93,0 Nm a 7.000 rpm
Refrigeración: Líquida
Encendido: TCI
Alimentación: Inyección electrónica
Embrague: Multidisco con sistema antirrebote
Caja de cambios: Seis velocidades
Chasis: Diamante Deltabox de aluminio fundido a presión
Suspensión delantera: Horquilla telescópica invertida KYB completamente regulable