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Así actuaron 50 motociclistas contra el bullying

Este es un claro ejemplo de cómo los “motoqueros” ayudan a combatir un problema, en este caso algo tan resonante como el bullying. Así se unieron 50 motociclistas, para acompañar a un chico de 11 años.

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Este es un claro ejemplo de cómo los “motoqueros” ayudan a combatir un problema, en este caso algo tan resonante como el bullying. Así se unieron 50 motociclistas, para acompañar a un chico de 11 años.

El acoso escolar lamentablemente es común en todo el mundo, tanto en nuestro país como en otros. El bullying era algo que sufría Phil Mick, un chico de 11 años, que comenzó sexto grado en el instituto Dekalb Barons, en Indiana. Preocupado tomó la decisión de contárselo a Tammy, su madre, para que lo ayude. A ella se le ocurrió una gran idea, que funcionó a la perfección.

Las motos contra el bullying

Tammy llamó a un vecino de la zona, conocido por tener un negocio de venta de motocicletas y repuestos. Cuando Brent Warfield, el hombre en cuestión, escuchó la historia, no lo dudó ni un minuto, armó un plan para que el acoso termine de una vez y para siempre.

Warfield se contactó con su grupo de amigos, todos amantes de las motos, para que juntos apoyen a Phil en su primer día de colegio. Así el chico inició su nuevo curso llegando a la escuela escoltado por 50 motociclistas, y por supuesto grabaron el momento para pudiese verlo cuando quiera.

En el vídeo lanzado en las redes sociales se escuchan las declaraciones de los involucrados. Gracias a ello el caso de Phil se hizo público, pero además anima a otros chicos que están en su misma situación. Para que de esta manera se pueda combatir una problemática escolar como es el bullying. Varios medios de todo el mundo mostraron las imágenes del apoyo que recibió este nene de 11 años, como por ejemplo en el Facebook oficial de ABC.es.

Warfield explica porque decidió ayudar al niño, “Cuando escuchás que pegan a un chico porque no tiene dinero, porque lleva ropa gastada o porque tiene sobrepeso te afecta. Yo tengo un niño de 11 años, así que no podía quedarme de brazos cruzados”. Mientras que la madre de Phil se muestra feliz y concluyó: “llegó del colegio con una sonrisa, y antes no lo hacía”.

 

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