Robert, un motociclista de 85 años internado en cuidados paliativos, tuvo durante su cumpleaños un último paseo en moto, rodeado de un centenar de Harley-Davidson.
Robert “Bob” Patterson conoció el mundo de las motos en su juventud, cuando se enamoró de las Harley-Davidson. Esa pasión lo llevó a estar 62 años de su vida sobre dos ruedas, disfrutando de las rutas, las rodadas y los festivales de motociclistas en Estados Unidos. Hace tiempo lo internaron en cuidados paliativos en un centro en Ohio, para su cumpleaños número 85 pidió un deseo: “ver 100 motos en el parking”. La sorpresa para ese día fue mucho más grande.
La última rodada de Bob
“Quiero ver 100 motos en el parking”, le dijo Robert a su enfermera Rebecca, poco antes de su cumpleaños. La mujer habló con las hijas de Bob y organizaron una sorpresa magnífica para el anciano, mucho más que solo colocar cientos de motocicletas en el estacionamiento del centro médico.
La semana pasada, el día en que Bob cumplió 85 años, cientos de Harley-Davidson estacionaron en el centro médico de Ohio, además de varios Jeeps. Todos fueron a honrar en vida a Robert, que además de ser un apasionado de las dos ruedas fue parte de la armada norteamericana, más precisamente de los Marines de Estados Unidos.
El hombre pudo saludar a todos sus invitados y mirar cada uno de los vehículos que habían llevado. La sorpresa y la alegría fueron a mayores cuando Robert supo que lo llevarían a dar una vuelta. Ayudado para levantarse de su silla de ruedas, Bob pudo pasarse al sidecar de una H-D para dar su última rodada. 20 minutos para recorrer 10 kilómetros, hasta con escolta de la policía, fueron suficientes para que este motociclista de 85 años pudiera cumplir su deseo y andar otra vez en una Harley-Davidson, como en los viejos tiempos.
