Dos Royal Enfield customizadas por Sinroja Motorcycles
Los británicos de Sinroja Motorcycles tomaron como base unas Royal Enfield para hacer dos excelentes trabajos, que bautizaron como Surf Racer y Gentlemen Brat. Ambas hermanas fueron presentadas en el Wheels & Waves.
Los británicos de Sinroja Motorcycles tomaron como base unas Royal Enfield para hacer dos excelentes trabajos, que bautizaron como Surf Racer y Gentlemen Brat. Ambas hermanas fueron presentadas en el Wheels & Waves.
Los preparadores de Sinroja Motorcycles decidieron llevar dos chiches de lo más llamativos a uno de los eventos moteros más importantes, como es el Wheels & Waves. La Surf Racer y la Gentlemen Brat son tan diferentes como parecidas, porque son de diseños denotadamente distintos, pero tienen el mismo espíritu.
Los secretos de la Surf Racer
Esta máquina nació como una Royal Enfield Continetal GT Surf Racer, y se ve así luego de haber pasado por las manos de los chicos de Sinroja. El trabajo de transformación sin dudas es perfecto en todos los sentidos, desde las líneas de diseño hasta los cambios en la mecánica.
El motor es un EFI 535 que ha sido adaptado con un carburador Dell’Orto, tiene una nueva admisión, ahora lleva pistones de alta compresión y varias actualizaciones que lo hacen mucho más funcional.
El chasis se reestructuró, especialmente por el doble amortiguador trasero que pasó a ser tipo cantiléver, además del nuevo basculante y el subchasis. La horquilla invertida también se adaptó a las nuevas prestaciones del renovado modelo. Por su parte los frenos pasaron a ser de la firma Brembo. Aparte suma el escape que ahora sale debajo de la parte trasera.
La estética retro es básicamente negra con detalles en celeste, sus líneas son perfectamente estilizadas y hechas para dar la sensación de velocidad al límite. Se completa con unos neumáticos Pirelli Diable Supercorsa SP de 17 pulgadas, que sustituyen a las originales.
La opuesta Gentleman Brat
Con el mismo espíritu los creados británicos hicieron la Gentleman Brat, que parte de la base de una Royal Enfield Himalayan. A simple vista se pueden ver las diferencias con la moto anterior, partiendo del estilo y el color, pasando por las prestaciones.
El cambio estético se nota a simple vista, el blanco y el gris (algo azulado) se mezclan de maravilla en este ejemplar. Tiene un estilo notablemente brat, de allí su denominación. El faro circular y las intermitentes coronan el aire retro, además de conjugarse a la perfección con el nuevo subchasis recortado.
La parte mecánica se mantuvo tan y como era en el modelo original, se conservaron tales elementos como las suspensiones (aunque reforzadas), los frenos y el depósito. El escape es uno de los puntos renovados, que ahora sale por el costado de la moto. Además se ha cambiado el manillar y se le agregaron unas llamativas llantas de 16 pulgadas, radiales y anchas. Lo más particular es su asiento de cuero hecho a mano especialmente.