La pequeña máquina de la casa del ala dorada se presenta sin necesidad de competir en velocidad, potencia, o ventas. Es más bien una perfecta opción para recorrer la ciudad con bastante estilo.
La pequeña máquina de la casa del ala dorada se presenta sin necesidad de competir en velocidad, potencia, o ventas. Es más bien una perfecta opción para recorrer la ciudad con bastante estilo.
Remodelada por los japoneses hace nada, la Honda Monkey 125 es uno de los esos modelos simpáticos que traen a todo tipo de público. Con su última actualización muestra además su costado más retro, que complementa con su siempre presente sencillez.
Pequeña, ágil y cómoda
Al contrario de lo que puede parecer por sus dimensiones, la Monkey es una moto bastante cómoda. Tiene 1.710 mm de largo, por 755 mm de ancho y 1.020 mm de alto; mientras que el asiento está a 775 mm, tan esponjoso que al sentarse se está muy a gusto. El manillar está colocado a una altura ideal, al igual que las estriberas, dan como resultado que las rodillas no choquen con el manubrio a la hora de tomar curvas (por supuesto, hablamos de estaturas promedio).
Por su geometría, esta máquina de dos ruedas se vuelve una aliada en el tráfico complicado; ya que se muestra muy ágil, y sobre todo manejable. Su parte ciclo consta de un chasis de acero robusto, horquilla invertida de 100 mm de recorrido y amortiguador de 104 mm. Además los neumáticos mixtos de 120/80 y 130/80, calzados en las llantas de 12 pulgadas, es resistente a los pozos que pueda haber en las calles.
Con un peso de 107 kilos, los componentes de la frenada no necesitan hacer mucho esfuerzo. El disco de 220 mm delantero con pinzas de dos pistones y el atrás de 190 mm con pinza de monopistón, son suficientes para que la Monkey se paré perfectamente en cualquier situación. Además suma sistema de asistencia ABS en la rueda delantera, que es funcional a la plataforma inercial de la mejor calidad de Honda.
Por su parte, el motor bicilíndrico de 125 cc está muy alejado de ser algo bestial, pero se ideal para el uso diario. El propulsor refrigerado por aire alcanza unos 9.3 cv de potencia, que con la versatilidad en el andar de la moto, logran más que suficiente. La caja de cambios es de cuatro velocidades, y se puede acelerar hasta casi los 100 km/h, con un consumo muy bueno. El tanque de la Monkey puede albergar 5.6 litros, y gasta unos 2 litros cada 100 kilómetros, que dan como resultado una genial autonomía.
Además de todas sus características positivas, la Honda Monkey muestra un estilo retro envidiable, con un diseño muy logrado por parte de la fábrica japonesa. Si bien no se consigue por ahora en el mercado argentino, estamos al tanto de su precio en Europa, unos 4.100 €, no tan convincente para un modelo de este segmento.