La Suzuki GSX-S1000S Katana ya está entre nosotros

Después de su presentación en el INTERMOT, te traemos toda la información y los detalles de esta nueva versión de la Katana que tanto esperábamos. Llega con cifras como 150 CV de potencia y 108 Nm de torque.

En 1981 la Suzuki Katana rompió el molde de la época para convertirse en la leyenda que es hoy. Ahora renace después de tanta expectativa, y otra vez se coloca en la vanguardia del segmento deportivo, para ser una referencia de las neoretro. Con una mecánica de primer nivel, una tecnología que acompaña y una línea de diseño prolija a la vez que radical, así es la nueva GSX-S1000S.

Detalles para ser legendaria

El espíritu de la Katana comienza en su logo, que representa nada menos que a la espada de los samurái, y se completa en el perfeccionamiento de su terminación. Entra por los ojos con su angulosa estética herencia de las deportivas ochenteras, que sin embargo está llena de elementos tecno como los faros de LED o el cuadro de mandos LCD digital, con gráficos blancos y fondo negro.

Sus forman se componen casi sencillamente, el frente delimitado por sus líneas y la cúpula ahumada, el tanque de 12 litros lleno de rectas, el manillar ancho algo elevado, el asiento a 825 mm del suelo, el colín cuadrado y el portapatente unido al basculante. Una ergonomía que ofrece tanto comodidad como capacidad de diversión, basándose en su equilibrio y su posición de manejo.

Los aspectos de siglo XXI

Por supuesto que detrás de toda esa estética de años dorados, se esconde un paquete de elementos de última generación. Como corazón un motor de cuatro cilindros en línea de 999 cc, DOHC, refrigerado por agua, que genera una potencia de 150 cv y un par máximo de 108 Nm. Gracias su electrónica funciona en tres niveles de control de tracción, con asistente a bajas revoluciones, Easy Start System.

El chasis es un bastidor de doble viga de aluminio, con un basculante tomado de la GSX-R1000 de 2016, más suspensiones compuestas por una horquilla invertida KYB de 43 mm regulable y un monoamortiguador regulable. En la frenada cuenta adelante con un doble disco delantero de 310 mm, mordido por pinzas Brembo radiales monobloque de cuatro pistones, y detrás con un disco simple; que suma ABS de Bosch.

La Suzuki Katana se completa con llantas de tres radios dobles, para combinar con la estética vintage, donde calza neumáticos especiales de serie, unos Dunlop Sportmax Roadsport 2. Están fabricados con un compuesto específico y diseño semi-slick, hecho específicamente para ser utilizado en esta mítica máquina.

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