El camino más mítico de todo Estados Unidos y el sueño de cualquier motociclista rutero. Si bien nosotros tenemos nuestra propia versión, la 66 es una ruta para vivir una experiencia única.
Los viajes en motos son únicos, y si se hacen por rutas míticas, son más únicos todavía. Ese es el caso por ejemplo de la Ruta 40, que podemos disfrutar en nuestro país. Pero además de ella, existe un recorrido más antiguo e icónico, que va de Este a Oeste de los Estados Unidos: la Ruta 66.
Allí se unen, además de ciudades, sueños y aventuras, kilómetro tras kilómetro de los 3.939 que tiene en total esta ruta. Desde campos verdes hasta, pasando por el desierto, se podría resumir a estos estados: Illinois, Misuri, Kansas, Oklahoma, Texas, Nuevo México, Arizona y California. La Ruta 66 se construyó en noviembre de 1926, y ya no se puede recorrer ininterrumpidamente, pero siempre será The Main Street of America (La Calle Principal de América).
Papeles
Primero que nada deberemos cumplir con los requisitos para entrar a Estados Unidos, como son el pasaporte y la visa correspondiente (siempre se puede preguntar en la embajada para más información). Una vez que tengamos esto, podemos empezar a planear qué visitar y cuando tiempo estar. Lo ideal es tomarse como mínimo 15 días, pero mientras más sean mejor, porque este viaje puede ser interminable si se quiere.
Recorrido
Antes de llegar a USA podemos alquilar una moto, a través de internet o de la agencia de turismo (si es que compramos un paquete); también tener un seguro de viaje es lo ideal. Luego planearemos los kilómetros que haremos por día, la comida, y otras nociones básicas. Siempre es bueno conocer nuestro límite, es decir cuántos km estamos dispuestos a recorrer sin cansarnos, así como cuántas horas (no es lo mismo 6 que 12 horas).
Para la foto
No vamos a decir qué hacer, pero… hay sitios donde vas a querer sacarte una foto, o parar por lo menos a mirar. Hay que empezar por el lugar exacto donde comienza o termina, según desde donde salgas, la Ruta 66: Jackson Boulevard y Michigan Avenue, en Chicago (Illinois), o el muelle de Santa Mónica (California).
El impresionante Gran Cañón es uno de los sitios naturales más impactantes que podés conocer en esta ruta, y ni hablar del tramo que cruza el desierto de Arizona con su asfixiante calor. Pero volviendo al Gran Cañón, se puede visitar con el Grand Canyon Railway, que se adentra por el paisaje de perfecta manera.
Dónde dormir
Seguimos sin querer presionarte, pero si vas a recorrer la Ruta 66 es casi obligatorio parar en alguno de los clásicos “moteles” ruteros (sí, los que vemos en las películas). Si bien somos libres de elegir, si queremos caer en lo común hay dos que son míticos: The Blue Swallow Motel, Rancho Hotel (Nuevo México) y Wigwam (Holbrook, Arizona).
Cada uno tiene sus propias características: The Blue Swallow conserva la estética de los años 50; Rancho Hotel es conocido por la cantidad de estrellas de Hollywood que durmieron allí; Wigwam consta de habitaciones construidas en forma de “tipis”, o mejor dicho, la típica tienda que usaban los pueblos originarios de Norteamérica.
Los imperdibles, y ¡la comida!
En Texas se encuentra el “Cadillac Ranch”, está bien que nos gusten las motos, pero esta obra de arte al aire libre es increíble: la evolución de la parte trasera del Cadillac en el medio del desierto… Esto nos lleva también a recomendarles buscar “cementerios de autos”, que son más comunes de lo que parece. Es muy normal encontrar lugares donde se amontonan Dodge, Chevrolet o Plymouth, que están en malísimas condiciones.
Pasar por Seligman, en Arizona, es como viajar en el tiempo; porque este pueblo se quedó anclado en los año 50. Justamente en el mismo estado, y aludiendo a la misma década, el Mr D’z en Kingman es uno de los restaurantes más icónicos de la Ruta 66. Ni hablar que ahí se pueden comer los sándwiches tradicionales, las alas de pollo picante o los clásicos batidos de helado (es como estar en Volver al Futuro). Tally’s Café, en Tulsa (Oklahoma), también tiene la clásica estética de esa época, con los mejores desayunos americanos y las mejores hamburguesas de la 66 (según algunos).
Otro lugar para ir a comer es el Bagdad Café, todo un punto turístico de la Ruta 66, y lugar donde se grabó la película homónima. Pero no es el único lugar donde se debería parar a tomar algo, ya que Chicago es una ciudad famosa por sus tabernas en los “metros” (mejor conocidos por nosotros como subtes). Billy Goat Tavern es uno de los más antiguos, y donde van la mayoría de los periodistas.
Igualmente, como dijimos al inicio, la experiencia es única, y cada quien puede optar o no por todos estos emblemáticos lugares. Así como también visitar otros que no pudimos nombrar (por cuestiones de espacio…).