La firma italiana debió actualizar obligadamente su emblemático modelo para que entre dentro de la normativa Euro4, pero puso todo su empeño para que la Corsaro no pierda ni un pelo de todo su poderoso andar.
La estricta norma europea de emisión gases para cuidado del ambiente puso en jaque a todas las marcas. Todos los modelos sufrieron cambios para presentarse nuevamente en sociedad y poder ser homologados para andar por las calles del viejo continente (y del resto del mundo). Varios vieron bajar en rendimiento de míticas marcas, mientras que otros actualizaron a pleno, transformando de raíz.
Moto Morini puso en la balanza las opciones y se decidió por remodelar el diseño, conservando la fuerza de la Corsaro 1200 ZZ. Convirtiéndose así en una muestra de que lo se debe hacer: cambiar sin cambiar. Porque continúa igual de poderosa que siempre.
Sin perder el alma
El motor fue tocado hasta que se consiguió que entre dentro de las regulaciones correspondientes. Pero sigue siendo un bicilíndrico en V que perdió el carácter que siempre supo tener. Los 1187cc son capaces de generar 139cv a 8.500 revoluciones, y el torque llega a 124Nm a 6750rpm.
Otro de los cambios para bien fue el escape, que se luce de lado. Es totalmente nuevo y está firmado por Zard, que supo hacer una maravilla. El caño limita las emisiones de gas, como piden en Europa, pero no deja de hace un sonido perfecto para hacer hablar a la Corsaro 1200 ZZ.
Más italiana que la pasta
El motor fue fabricado al sur de Milán, como debe ser para un modelo Moto Morini. La suspensión está hecha en Bolonia, por la firma Mupo. Hablamos de la horquilla invertida multirregulable con un recorrido 135mm. Mientras que atrás completa con monoamortiguador, igual de ajustable que la otra pieza y con el mismo recorrido.
Los frenos, como no podía ser de otra manera, son marca Brembo. Adelante porta un doble disco de 320, con pinzas radiales monoblok y bomba de 16mm. Por su parte, atrás lleva un único disco de 220mm. Ambos están bajo el sistema de ABS, complemento que no es italiano, porque es de los alemanes de Bosch.
El nacionalismo figura también las llantas de aluminio forjado, que son unas Pirelli Diablo Rosso III, ambas de 17 pulgadas. Coronando así algo común de todas las Motos Morini, marca que siempre encuentra la forma de utilizar todos los elementos de fabricantes compatriotas.
Más características exclusivas
Por supuesto el modelo se puede personalizar, cosa que viene haciendo la firma para conformar a sus clientes vip. Aunque trae ya de fábrica algunos elementos de última tecnología.
Nos referimos al nuevo embrague anti-rebote APTC, al más que eficiente sistema de cambio Quickshift; y también a la pantalla TFT multifunción a color (que es de la marca italiana AIM). Además es “Full LED”, ya que está dotado con esa tecnología de iluminación en todas sus luces. Se termina por completar con varios accesorios hechos exclusivamente por Rizoma.
Todo este poder mecánico y esta personalización hacen que la Corsaro 1200 ZZ tenga un precio de 25.000 dólares, que no parece caro si pensamos en su producción.
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