Blood Bikers: los motociclistas que salvan vidas

La Nationwide Association of Blood Bikes funciona en todo el Reino Unido e Irlanda, son nada menos que 31 grupos de motociclistas unidos para salvar vidas en casos de emergencia.

Comenzaron hace 56 años, cuando Margaret Ryerson y su marido fundaron la asociación Surrey ‘s Emergency Volunteer Service. Lo que hacía era poner motocicletas comunes al servicio del sistema público de salud, para que puedan actuar ante emergencias. En 1969, nació otro grupo, Freewheelers, creado por Des Gibbons, con el mismo fin.

De esas dos asociaciones ninguna sigue en pie, pero ambas dieron los primeros pasos para crear la Nationwide Association of Blood Bikes (comúnmente llamados “Blood Bikes”). Agrupan a más de 31 clubes de motociclistas en el Reino Unido e Irlanda, son un total de 2.700 voluntarios. Suelen actuar cuando los servicios de ambulancia tienen menos frecuencia, como los feriados o fines de semana, así como también por la noche.

Estos héroes anónimos trabajan con motos especialmente preparadas para la tarea, ya no como antes que eran modelos de calles comunes. Las unidades descansan en las casas de cada miembro, aunque no son de su propiedad, sino que pertenecen a los clubes.

Cada grupo se encarga de tener cuidadas las motocicletas, con los colores apropiados y la palabra “Blood” en el frente, para identificarlas. Además llevan una luz azul, igual a la de otros servicios de emergencias, que se prende cada vez que deben cumplir con su labor. Desde hace unos años se les permite pasar semáforos en rojo, aunque no pueden ir a más velocidad de la permitida.

Entre su equipaje se puede contar: bolsas de sangre, leche materna, medicinas, vacunas, pruebas de rayos X, y hasta alguna vez transportaron órganos para trasplantes. Hacen unos 150 viajes promedio por día, es decir más de 50.000 salidas anuales. Por ejemplo, en 2015 alcanzaron la cifra de 29.300 bolsas de sangre para transfusiones.

Gracias a estos valerosos motociclistas se salvan miles de vidas al año, por la facilidad y rapidez con la llegan al lugar donde son necesarios. Además el estado puede ahorrar miles de libras esterlinas, ya que el mantenimiento de las unidades de dos ruedas es más barato que otros vehículos.

Sin importar la hora, o si es Navidad o Año nuevo, los miembros de Blood Bikers dejan sus hogares para salir de inmediato. Hacen lo que más aman, que es andar en moto, pero con el agregado de hacer un bien a su comunidad. Son verdaderos ejemplos de vida.

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