En la provincia norteña de Tucumán la preocupación por el robo de rodados crece cada día, así como los arrebatos de los motochorros. Para solucionarlo 10 legisladores han presentado un proyecto de ley curioso. Si finalmente se acepta y entra en rigor los locales de motocicletas deberán colocar un dispositivo de “sistema de posicionamiento global” (GPS) en todas las unidades, además los usuarios tendrán que equipar sus vehículos con lo mismo.
Se trata de un artículo para modificar la ley ley 6.836, sancionada en 1997 para adherir a la Provincia a la Ley Nacional de Tránsito. De esa forma las concesionarias “deberán proceder a la instalación y puesta en funcionamiento de dispositivos de rastreo GPS en todas las unidades usadas y 0 kilómetro”. Así como tendrán “idéntica obligación” los particulares en sus motos para “que se encuentren aptas para la circulación”. Aclara también que dependerá del Poder Ejecutivo “todo el mecanismo para la implementación de esta tecnología y la forma de cumplimiento de los deberes que se especificaron”.
La iniciativa remarca: “Las estadísticas de nuestra provincia demuestran que los robos de motos y los arrebatos son las modalidades delictuales que presentan mayor frecuencia, y están dotadas de una connotación social que causa angustia y zozobra en los ciudadanos, impactando de lleno en la sensación de inseguridad… (los robos) están acompañados de una violencia inusitada de los delincuentes, los que en muchas ocasiones, mediante el uso de armas, terminan ocasionando la muerte de la víctima”.
Lo negativo
Según recalca Antonio Mahtuk, vicepresidente de la Cámara Argentina de Concesionarios de Motos, al diario La Gaceta de Tucumán, “no sería difícil” llevar a cabo la propuesta. Aunque sí podría suponer un aumento en los precios de las motocicletas por el agregado de este sistema.
Mahtuk explicó: “Habría que analizarlo y desarrollarlo en detalle. Hoy, si hablamos de una moto chica, el gasto de patentamiento llega al 10% del costo del rodado. Además, no hay demasiadas empresas desarrollando esta actividad. También se debe tener en cuenta si, además de la instalación del GPS, el usuario tendrá que abonar un cargo mensual por la vigilancia satelital. Es un tema interesante, que puede desalentar a los delincuentes, pero no sería fácil de aplicar de forma obligatoria y simultánea o en un período corto de tiempo”. Y terminó por aclarar: “Quienes colocan el sistema de GPS suelen ser propietarios de motos más grandes, de mucho valor”.
En Gente de Moto abrimos el debate: ¿Sería una solución viable para los robos de motos o para los arrebatos de los motochorros?
