Hemos visto varias joyas en venta, y esta se puede sumar al listado. Es una Harley-Davidson JD 1000 con sidecar, fabricada en 1928. Entre los detalles que la hacen especial no solamente está su edad, 92 años, también se ha certificado que ha tenido un dueño en toda su vida. Por si eso te parece poco el estado de conservación es excelente, tanto por fuera como por dentro.
Se vende de primera mano
El coleccionista privado James Cousensha decido poner en venta una de las unidades de su propiedad, nada menos que una H-D de 92 años. Este norteamericano compró el ejemplar hace solamente 2 años y no le ha dado uso, así que en su cuentakilómetros figura la cantidad que hizo su único dueño. Aunque a muchos les parezca increíble esta máquina de Milwaukee recorrió nada más que 3 kilómetros en sus 92 años de existencia.
Pese a su edad luce impecable gracias a los restauradores de la casa de Las Vegas Rick’s Restorations, los especialistas trabajaron en el rodado siempre con piezas originales. Se ha retocado el asiento de cuero monoplaza, el parabrisas y las llantas de radios. En su parte ciclo se han revisado cada uno de sus elementos, entre ellos los frenos a tambor.
El motor de la JD 1000 con sidecar es un propulsor dos cilindros en V clásico de la marca americana; en este caso es el último de los F-Head, predecesor del Flathead. La potencia del bicilíndrico alcanzaba originalmente unos 20 caballos de fuerzas; funcionaba gracias a una caja de 3 velocidades.
Según la historia, la JD era una de las más deseadas en la década de 1920, cuando H-D estaba en pleno apogeo, y no sufriendo pérdidas como se encuentra ahora. De hecho la fábrica utilizaba el modelo en las carreras, y con uno de esos ejemplares la marca obtuvo su primera victoria, en 1921, en Fresco, California.
Esta Harley-Davidson JD con sidecar hasta parece un regalo con una base para pujar de 85.000 dólares. Seguramente cuando acabe la subasta, en 10 días, terminará con un precio más elevado. El nuevo dueño podrá tener esta unidad única, que viene con la documentación pertinente y hasta con los manuales originales, además de algunas publicidades de la época y una foto del propietario original con ella.
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