Hay muchas marcas de automóviles que también se dedican a hacer motos, pero hay otros que solamente ven las dos ruedas de lejos. Algunas de esas firmas ajenas a las motocicletas han probado con prototipos las mieles de entrar en el mundo de los motoqueros.
Porsche AMK
La mítica marca alemana de coches exclusivos supo tener un concept, basado en la Yamaha SR500. La AMK (siglas de Alternatives Motorrad Konzept) luce un carenado completo muy extraño, que cubre motor y ruedas y fue hecho especialmente para que nada de la moto se ensucie.
Fue diseñada en 1978 y como nunca llegó a producirse en serie, quedó como un recuerdo de que Porsche en algún momento de su historia intentó hacer una motocicleta.
Lamborghini Design 90
Lambo también quiso hacer su vehículo de dos ruedas, que a simple vista tiene mucha mejor pinta que lo hecho por los alemanes. Este diseño de los ingenieros Claude Fior y Thierry Henriette luce verdaderamente radical, muy deportivo y, al mismo tiempo, elegante, como puede ser cualquier Lamborghini de cuatro ejes.
Se fabricaron 10 unidades de esta bestia amarilla de 180 kilos y motor Kawasaki. El propulsor de cuatro cilindros, 16 válvulas y 1000 cc, logra llevar a la máquina a 250km/h, gracias a su potencia de 120cv. Además estaba equipada con chasis de aluminio, suspensiones ideadas especialmente, y un carenado de lo más sport. Todo para competir con las más exclusivas motos, aunque finalmente el proyecto no prosperó a más. Una de las razones era el elevado precio: hoy la Desing 90 cuesta aproximadamente unos 60.000 dólares.
Ariel Ace R
La firma Ariel se dedica a hacer deportivo híper exclusivos, como el Ariel Atom; pero no contentos con eso, también decidieron hacer la versión dos ruedas de sus automóviles. Así crearon la Ace R, que se fabrica como el cliente pida; hasta ahora se han producido 10 unidades.
La Ace R cuenta con un motor tetracilíndrico de 1237cc, que alcanza 173cv de potencia; lo hereda de la Honda VFR1200F. A tamaño propulsor se le suman suspensiones Öhlins y frenada Nissin a la altura de las circunstancias. Además se agrega sistema ABS, control de tracción y varios chiches tecnológicos más.
Lotus C-01
Ideada por Daniel Simon y Kodewa, esta Lotus de dos ruedas es una superbike distinta por donde se la mire. Tuvo una producción en serie bastante reducida de 100 unidades aproximadamente. Su diseño está pensado para la aerodinámica y la velocidad; fue fabricada con titanio, fibra de carbono y acero aeronáutico.
Sus 181 kilos se mueven gracias a un bicilíndrico de 1195cc, basado en el propulsor de la KTM 1190 RC8R; la potencia máxima que acusa es de 200cv. Lleva frenos marca Brembo y suspensiones Öhlins.
Ferrari 900
Única dos ruedas legítima de la firma del Cavallino Rampante, la historia cuenta que el hijo de Enzo Ferrari dejó que David Kay la construyera en la década del 90. Equipada con discos de freno Brembo y suspensiones WPS, tenía un motor tetracilíndrico de 900cc que alcanzaba 105cv de potencia. La Ferrari 900 tenía un diseño retro, bastante lejos de la elegancia de los deportivos de la marca, pero estaba numerada como si se tratase de un vehículo más de la empresa.
Dodge Tomahawk
Esta especial máquina no sabemos si terminar de catalogarla como moto, por sus cuatro ruedas, aunque los pares están bastante pegados, asemejándose a una verdadera motocicleta. Ya hablamos de ella, porque está en la lista de las más rápidas del mundo, gracias a su supuesta velocidad de 482km/h. Además, es también una de las más caras con un precio de 550.000 dólares.
Es un extraño concept, con un motor V10 heredado de un Dodge Viper, cuenta con 507cv de potencia, por su cilindrada de 8.277cc. Lleva chasis monocasco, y suspensiones parecidas a las motos de tres ruedas; el lado negativo es el tanque de combustible de 12.7 litros, que no parece ser suficiente. En total se fabricaron 9 unidades.
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